Definición de Diálogo ejemplos, factores, y clases

DialogoEl diálogo es un intercambio de ideas por parte de al menos dos involucrados en el que se busca algún fin, como encontrar la verdad, crear empatía, llegar a acuerdos, etc.

Es necesario situar al diálogo dentro del circuito del habla debido a que cada uno de sus componentes se ven involucrados: primeramente, se necesita a una persona o entidad que emita un mensaje (el emisor), otra que se encargue de recibirlo (el receptor), un tema (el referente), un medio por el cual se dé la conversación (canal), una lengua (código) y el diálogo por sí mismo (mensaje). Teniendo en cuenta esto, podemos decir que los factores principales son:

Reciprocidad

Una condición necesaria para el diálogo es que tanto el receptor como el emisor en algún punto intercambien roles, es decir, si una persona acude a otra para contarle algo que le haya pasado entonces esa persona estará hablando, sin embargo, si esta no permite que el otro involucrado emita su opinión o de algún consejo, entonces la charla será unilateral debido a que sólo una persona estará emitiendo un mensaje.

Durante el diálogo una primera persona habla mientras que la otra escucha para que posteriormente se inviertan las posiciones, de modo que la primera persona escuche lo que la segunda tiene que decir. Si la conversación involucra a más de dos personas, entonces cada una deberá tomar «turnos» para escuchar y hablar de modo que todos participen, si bien puede ocurrir que uno de los actores se apropie de la palabra.

Sin interrupciones

Para que el diálogo sea fructuoso es necesario que no exista ninguna clase de ruido que pueda interrumpir la comunicación. Este ruido puede ser físico, por ejemplo: estamos hablando por teléfono con una persona, pero en ese momento empieza a llover fuertemente, por lo que será difícil entendernos; actualmente también podemos identificar al ruido con problemas de conexión en caso de que estemos haciendo una llamada o una videollamada por internet.

También existen otro tipo de ruidos menos comunes, por ejemplo, durante una charla cotidiana es posible que nuestro receptor esté escuchando correctamente nuestro mensaje porque nuestra dicción es buena o porque él posee un aparato auditivo adecuado (es decir, que escucha bien); sin embargo, cabe la posibilidad de que su mente esté en otro lugar y que, en lugar de decodificar mi mensaje, esté pensando en alguna caricatura o en algún otro tema diferente al de mi conversación. En este sentido, no sólo los ruidos físicos pueden estropear la comunicación y, por lo tanto, el diálogo, sino también los no perceptibles.

El diálogo literario

Los diálogos en la literatura suelen colocarse de diferentes formas. En el género dramático encontramos siempre el nombre del personaje y su diálogo correspondiente:

María: ¿Qué has venido a hacer aquí?
Tomás: Necesito el dinero de la renta.

En la narrativa, por otro lado, los diálogos se marcan con guiones largos; sin embargo, también hay ocasiones en las que se colocan varios diálogos juntos y estos sólo se pueden distinguir por pausas marcadas con comas o puntos, e incluso, en otras ocasiones, sólo es posible distinguirlos por el tipo de discurso de cada personaje:

Te dije que no vinieras.
¿A dónde se supone que debía ir?

¿Cómo se supone que le explique a mi papá lo que pasó? Ese es tu problema, Sara, yo te dije que no fueras a ese lugar. Sí, sí, me dijiste, pero bien que me acompañaste, ahora le decimos juntas. Ni que estuviera loca.

Clases de diálogos formales

Existen también formas específicas de diálogo pensadas para un objetivo en particular, algunas de ellas son las siguientes:

Tertulia: se trata de una reunión informal a la que usualmente asisten intelectuales y académicos para discutir temas de distinta índole y de relevancia social, entre ellos, política, literatura, danza, pintura, artes, filosofía, ciencia y otros más.

Debate: se trata de una discusión en la que existe un tema central (que por lo general es de controversia) y donde cada una de las partes involucradas o invitadas al debate dicta su opinión respecto al tema y aporta argumentos según su postura e intereses. La finalidad de este es dar a conocer el diálogo de cada parte y, a veces, llegar a una conclusión de los mismos.

Mesa redonda: es muy similar al debate con la diferencia de que no existe una jerarquía entre los participantes.

Conferencia de prensa: sucede cuando una persona de importancia social da a conocer cierta información sobre un tema y se somete a un diálogo con varios entrevistadores usando una serie de preguntas, respuestas y comentarios.

Entrevista: es un diálogo entre dos personas, aunque puede haber más involucrados, donde existen dos roles claros, el entrevistador que es quien realiza las preguntas, y el entrevistado, que es quien las responde.

Si bien la idea del diálogo es sencilla, tiene ciertos matices que vale la pena recordar. Algunos pensadores clásicos griegos (especialmente Sócrates) no otorgaban una especial importancia a la comunicación escrita y defendían sus ideas a través de la comunicación oral y, por lo tanto, mediante el diálogo. Esta era la forma más adecuada de defender unas ideas, de contrastarlas con otras personas y de intentar llegar a una conclusión. Su defensa del diálogo tenía un objetivo: alcanzar la verdad. Esta práctica socrática tuvo una notable influencia en su discípulo más notable, Platón. Para mantener el espíritu de su maestro Platón escribió sus obras con un formato dialogado (los conocidos diálogos de Platon, en los que los personajes mantienen un debate permanente como método para acercarse a la verdad).


Autor

Escrito por Marcelo Jesús Salazar Martínez para la Edición #115 de Enciclopedia Asigna, en 08/2022. Marcelo es licenciado en Lingüística y Literatura Hispánica, actualmente estudia la maestría en Literatura Hispanoamericana con PNCP en la BUAP y se especializa en narrativa fantástica hispanoamericana de los siglos XIX, XX y XXI.