Definición de Soberanía

Martin Wimmer

La soberanía es la capacidad que tiene un colectivo de organizarse y tomar decisiones que les afectan, en tanto en cuanto, todos los que pertenecen a dicho colectivo acatan las normas que la mayoría establece.

Soberanía sobre la mesa del debate actual

A cuenta de acontecimientos recientes, como los referéndums de Escocia o Grecia, o de las aspiraciones independentistas de una parte de la sociedad catalana, el concepto de soberanía está más de actualidad que nunca.

A pesar de que la práctica totalidad de los países occidentales están organizados por medio de sistemas de gobierno democráticos, hablar del concepto soberanía se antoja complicado teniendo en cuenta las actuaciones de algunos gobiernos y la interpretación que éstos hacen del mismo.

Respetar las decisiones del pueblo, al menos esa es la idea

Definir el concepto de soberanía nunca ha sido sencillo. Alrededor de él, se han formulado diferentes teorías que pretendían establecer quienes son los poseedores de la soberanía, si el pueblo o las naciones. Pero sea cual sea el marco en el que se establezca, el concepto de soberanía va intrínsecamente unido al de poder.

Por lo tanto, ya sean pueblos o naciones los poseedores de la soberanía, lo que parece claro es que la soberanía puede identificarse con la voluntad mayoritaria de un colectivo. Por lo tanto, en base al respeto que todos asumen a las decisiones tomadas democráticamente, ésta voluntad debería cumplirse inexorablemente.

Conflicto de ideas y de lectura de la sociedad

Sin embargo hay dos cuestiones importantes a reseñar. Por un lado, qué ocurre si la voluntad popular expresada libre y democráticamente no es respetada por los gobernantes, y por otro, donde están los límites territoriales de la soberanía.

Ollo

En el primer caso, podríamos concluir que la soberanía se ve traicionada, y por tanto, quien la traiciona pierde toda legitimidad para gobernar, ya que en teoría, los gobernantes no son más que representantes del pueblo en las instituciones. Este es el caso recientemente acaecido en Grecia, donde el gobierno de Tsipras ha dimitido tras contradecir la voluntad del pueblo expresada en las urnas.

En el segundo caso, que es el que nos afecta de manera más cercana por el tema de Cataluña, hay un debate abierto. Los defensores del “derecho a decidir” argumentan que la soberanía de Cataluña corresponde al pueblo catalán, estableciendo un marco territorial para la misma que no se corresponde con el de un Estado. El gobierno, por su parte, responde que la soberanía reside en el pueblo español, por lo que cualquier cuestión relativa a la misma debe ser acordada por el conjunto de los habitantes del estado.

El concepto de soberanía presenta unos límites algo difusos, pero como hemos visto, la importancia de definirlos con claridad no es baladí. De a qué colectivo se le reconozca, en qué circunstancias y bajo qué límites geográficos,depende, en gran medida, cómo va a ser el futuro de millones de personas.


Escrito por Hernán Salazar para la Edición #30 de Enciclopedia Asigna, en 08/2015.